Ahora le toca el turno a uno de los eventos más importantes del año. Me refiero al festival de Eurovisión 2018 que congrega a una audiencia potencial entre 200 y 500 millones de "eurofans". Por cierto, me considero "eurofan" y bastante nostálgico y casi siempre lo he visto por televisión y este año no será una excepción.
Después del fútbol, este evento musical se convierte en la gran fiesta europea para los amantes de la música. Y si hay un gran cita hay, por lo tanto, audiencia, patrocinadores, ingresos, publicidad, etc...
La organización del evento cuesta la cifra de 20 millones de euros.
La organización del evento vende el licensing a unas marcas que en este año serán Vueling, Osram, Turismo de Portugal, etc... y éstas disfrutan en exclusiva de espacios publicitarios para generar posicionamiento, impacto y notoriedad de marca.
Pero no solamente las marcas quieren estar presentes en Eurovisión sino que los países más importantes financian la retransmisión. En nuestro caso, RTVE paga cada año a la Unión Europea de Radifusión (UER) una cantidad de dinero por participar cada año. La cifra de este año rondará los 400.000 euros en concepto de gastos de retransmisión, desplazamiento del equipo de TVE y manutención de los cantantes.
La venta de entradas también genera ingresos para la organización. Desde que se empezaron a vender en noviembre hasta abril de este año con precios de 35 a 300 euros es una fuente de ingresos y una gran oportunidad para los lovermarks que en este caso se convierten en eurofans.
No debemos olvidar que el país que organiza el festival, en este caso Portugal se beneficia del gran impacto económico que se genera gracias al turismo y a la restauración.
Quien gane este año en la edición de Portugal tendrá la una gran oportunidad de organizar la edición del año que viene.
Y quién se atreve a apostar el ganador de este año.......!
Me apuesto simbólicamente una cena que nuestros chicos quedan entre los cinco primeros clasificados....
David Pasarín
Os dejo la siguiente noticia que habla de ello abajo:
Eurovisión 2018, en cifras
SARA H. ASENADOR 12 MAY 2018 EXPANSION
Los representantes de España en Eurovisión, Amaia y Alfred (d), durante los ensayos. EFE |
El festival celebra esta noche en Lisboa su gran final, en la que compiten 26 países con propuestas que van desde lo sencillo e íntimo hasta lo vistoso y excéntrico. Chipre e Israel parten como favoritos y España, según las apuestas, se quedará fuera de los primeros puestos.
Desde 1956, Eurovisión se erige como uno de los los pocos eventos capaces de reunir a todos los países del Viejo Continente (y a alguna que otra nación invitada) bajo un mismo ritmo. Aunque a muchos el festival no les llame la atención -quizás por costumbre, quizás por sentir cierto desapego puntual por sus representantes-, lo cierto es que año tras año congrega a una media de entre 200 y 500 millones de espectadores en todo el mundo y en España se alza el programa no deportivo más visto de la temporada.
Esta noche, en su 63º edición, que tendrá lugar en Lisboa por primera vez en la historia, todas las quinielas apuntan a Israel y a Chipre como claros vencedores. Al margen de estas cábalas, lo cierto es que el certamen mueve una cantidad nada desdeñable de dinero.
- 355.000 euros. RTVE tiene que pagar cada año esta cantidad a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) para poder participar en Eurovisión, si bien el presupuesto que destina nuestro país al festival siempre es algo superior. Para hacernos una idea en 2016 se invirtieron 445.2363 euros, en 2015 el montante ascendió hasta los 396.918 euros y en 2014 se destinaron a este fin 386.994 euros. Aún no se han proporcionado los datos correspondientes a la edición de 2017. Este presupuesto emana tanto de los gastos de retransmisión (de las dos semifinales y de la final) como del coste que supone el desplazamiento hasta la sede de turno y la manutención durante dos semanas de los cantantes y del equipo de TVE. Los artistas no perciben ninguna remuneración por su actuación.
- 20 millones de euros. Se trata del desembolso estimado que ha supuesto la organización del evento. Este total se sufraga gracias a las cadenas europeas que retransmiten el certamen, a la del país anfitrión, a la ciudad donde tiene lugar (Lisboa confirmó que ha aportado 5 millones), a los patrocinadores del evento (entre los que figuran Vueling, Osram o Turismo de Portugal) y a la venta de entradas. La única vez que España albergó la gala, en 1969 tras la victoria un año antes del mítico "La la la" de Massiel, estos gastos ascendieron hasta los 100 millones de pesetas.
- 100 millones de euros. La Asociación Portuguesa de Hostelería y Restauración (AHRESP, por sus siglas en portugués) estima que el festival tendrá un impacto económico cercano a esta cantidad para la capital lusa, por lo que superaría el que en su momento tuvieron la Expo '98 y la Eurocopa de 2004. Se calcula que un total de 40.000 personas acudirán a la poderosa llamada de Eurovisión, lo que supone un aumento del 37% respecto al número de turistas que la ciudad recibió la semana inmediatamente anterior.
- Entre 35 y 299 euros. Es el precio de las entradas para disfrutar en directo del espectáculo. Se vendieron en tres oleadas (noviembre y diciembre de 2017 y abril de este año) y se agotaron tan rápidamente como cabría esperar, debido al enorme interés de los seguidores del festival (conocidos comúnmente como 'eurofans'). En la reventa, los tickets para ocupar una de las 20.000 localidades del Altice Arena han llegado a alcanzar los 10.000 euros.
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